Kirguistán es un pequeño país de Asia Central, con una superficie de solo 198 500 km². Está completamente enclavado, entre China, Kazajistán, Uzbekistán y Tayikistán. Sin embargo, goza de una naturaleza impresionante, con dos de las cadenas montañosas más altas del mundo, el Pamir y el Tian Shan, que cubren la totalidad del territorio y alcanzan más de 7 000 metros de altitud. Tenga en cuenta que esta geografía implica largas horas de carretera para conectar los extremos del país, a pesar de su reducido tamaño: será necesario atravesar numerosos pasos.